sábado, 28 de diciembre de 2013

Michael Jackson salvó a mi abuela

En diciembre de 1997, mis abuelos maternos, Joseph y Concetta Delisi, estaban en un vuelo de American Airlines de Nueva York a Los Ángeles, para visitar a mi familia durante la navidad.

A las dos horas de vuelo, mi abuela cayó (literalmente) enferma. Lo que comenzó como un dolor de estómago, acabó con mi abuela desmayada y temblorosa en el pasillo.

Cuando volvió en si, miró hacia arriba y junto a mi abuelo, estaba cogiéndola de la mano Michael Jackson.

"¿Está usted bien?" preguntó MJ, con su voz delicada.

Ayudó a mi abuela a ponerse en pie e invitó a mis abuelos a acompañarles en primera clase. Ellos aceptaron.

Mientras mi abuela descansaba, mi abuelo disfrutaba del servicio de primera clase y charlaba con Jackson. Hablaron de la familia, la comida y de Italia (los temas favoritos de mi abuelo).

Al aterrizar, Michael se ofreció para llevar a mis abuelos desde el aeropuerto hasta casa de mi familia en el valle. Ellos aceptaron una vez más.

Llevaron a mi abuela en silla de ruedas por el aeropuerto hacia la limusina de MJ, pero en un intento de esquivar a los paparazzi, la seguridad de Michael se vio forzada a hacer tres cambios de limusina.

Una vez arreglado y conduciendo por la 405N, Michael puso una de sus películas favoritas en aquellos tiempos, "Men in black" y la vieron juntos.

Una vez llegaron a la casa de mi infancia, mamá abrió la puerta y descubrió a mis abuelos de pie en la entrada, con Michael Jackson tras ellos sujetando sus maletas.

MJ entró en casa, dejó las bolsas y se quedó de pie ante el árbol de navidad. Se quedó enamorado de la belleza y el espíritu familiar de la casa.

Mi madre, increíblemente impactada, no pensó en coger una cámara para documentar el evento, en su lugar invitó a Michael Jackson a volver para la fiesta de navidad. Él declinó educadamente, volvió a su limusina y partió hacia Neverland Ranch.

Aunque nunca se tomó una foto, dejó un gran recuerdo en nuestra familia, un recuerdo que nos mostró el corazón de Michael Jackson y su genuina amabilidad.

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