"La gente nos decía 'Simplemente, lidiar con ello [el
racismo] porque así es el Sur*'. Eso es ignorancia y se enseña, porque no es
genético en absoluto. Los niños pequeños no tienen prejuicios. Me gustaría que pusiera esto entre comillas también. Yo no
soy una persona con prejuicios en absoluto. Creo que la gente debería pensar
más en Dios y la creación. Mirar las muchas maravillas que hay dentro de los
cuerpos humanos -los diferentes colores de los órganos, los colores de la
sangre- todos estos colores hacen cosas diferentes en el cuerpo humano. Es el sistema
más increíble del mundo; esto forma una construcción increíble, el ser humano. Y
si esto puede suceder en el cuerpo humano, ¿por qué nosotros no podemos hacerlo
como personas? Y así es cómo me siento. Y este es el por qué yo deseo que el
mundo pudiera hacer más. El racismo es lo único que odio. Realmente lo odio. Y
por eso es que trato de escribirlo, de ponerlo en las canciones, en el baile,
en mi arte -para enseñárselo al mundo. Si los políticos no pueden hacerlo, los
poetas deben ponerlo en la poesía y los escritores deben ponerlo en novelas.
Esto es lo que nosotros tenemos que hacer y creo que es muy importante para
salvar el mundo. [...] La principal cosa que yo más odio es la ignorancia, como
los problemas de prejuicios de América. Sé que es peor que en otros países. Desearía
poder tomar prestado de otros países, digo, como Venezuela o Trinidad, el
verdadero amor y personas daltónicas y
traerlas a América. Cuando viajas, te das cuenta de cómo de diferente es
América. [...] Tengo prejuicios contra la ignorancia. Contra eso es por lo que
tengo prejuicios principalmente."
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